El PSOE a OKDIARIO tras pedirle las facturas del Falcon privado de Sánchez: «Absolutamente descartado»

«Absolutamente descartado». De esa forma tan seca como rotunda ha contestado el PSOE a OKDIARIO cuando este periódico le ha pedido las facturas y los documentos de pago que acrediten que el partido costea realmente los vuelos que Pedro Sánchez hace en Falcon privado para dar mítines del partido, práctica que realiza desde las campañas de 2019. Acreditar este extremo es imprescindible para descartar que existen tratos de favor o acuerdos ocultos entre la empresa proveedora del Falcon y el PSOE. Más aún tras haber desvelado en exclusiva OKDIARIO que, después de que Sánchez empezara a subirse en ese lujoso jet, la empresa Gestair ha recibido del Gobierno 87,3 millones de euros en tres contratos públicos con los que su división de mantenimiento ha triplicado, como mínimo, lo que era su facturación media habitual antes de que el líder del PSOE se instalara en La Moncloa.

El PSOE ha dado versiones contradictorias al respecto desde que este periódico desvelara que el pasado fin de semana que Sánchez había volado entre Madrid, Murcia y Canarias en un Falcon privado para acudir a actos de campaña. Primero, la cúpula del partido dijo que el PSOE no corría con los gastos del Falcon privado, que no lo había contratado. Después, tras la insistencia de este diario con las evidencias que había recopilado, los socialistas dijeron que sí habían contratado ese flamante jet para la ronda mitinera de Sánchez.

Robles, Ribera y Gestair

A continuación, OKDIARIO destapó los multimillonarios contratos que le ha dado el Gobierno de Sánchez a la empresa Gestair desde dos ministerios controlados por los socialistas: el de Defensa (Margarita Robles) y el de Transición Ecológica (Teresa Ribera). Se trata de una inyección de fondos públicos totalmente extraordinaria, por desconocida hasta ese momento para Gestair. Su sociedad de asistencia técnica, Gestair Maintenaince S.L., jamás había disfrutado de tal volumen de negocio desde su fundación, en 2007; nunca habían aterrizado tantos fondos públicos en su cuenta de resultados como desde que Sánchez vuela en su Falcon privado.

La coincidencia de tratos privados y negocios públicos es tan evidente que hace aconsejable –si no imprescindible– despejar cualquier duda sobre la legalidad de esos acuerdos en los que se cruza una empresa, un partido político y el Gobierno que éste ocupa. La única forma de despejar las dudas razonables al respecto pasa por la presentación de las facturas y documentos de pago por parte del PSOE con los que acreditar que el partido paga efectivamente esos vuelos privados; es decir, que no se aprovecha del dinero del Gobierno para pagar o compensar desde Moncloa los vuelos privados que el partido pone a disposición de su líder.

Batería de preguntas sin respuesta

Este periódico se dirigió este jueves al director de comunicación del PSOE, Ion Antolín, para recabar esas facturas o documentos de abono. Por escrito, vía WhatsApp, OKDIARIO planteó la solicitud al dircom socialista, «ante el evidente interés público que tiene el asunto, en aras de la transparencia y a dejar meridianamente claro y despejar cualquier duda de conflicto o cruce de intereses al respecto».

A renglón seguido, este diario detalló lo solicitado: «Facturas recibidas del PSOE por parte de Gestair desde 2019 hasta la fecha y justificante de abonos de las mismas, con eliminación de los datos que se consideren especialmente sensibles por justificados motivos de seguridad o de protección personal»; «En caso de servicios aún no facturados, pero ya realizados, hoja o documento válido de contratación (siquiera una comunicación formal por mail) en la que se detallen las características del servicio a prestar, duración e importes acordados». «En particular, y sin perjuicio de lo anterior, detalle de los conceptos e importes recogidos en las facturas correspondientes a los servicios prestados por Gestair en vuelos de Pedro Sánchez en aviones privados en las siguientes fechas: 23 de mayo de 2019, 8 de noviembre de 2019, 9 de noviembre de 2019, 27 de octubre de 2019, 6 de mayo de 2023 y 7 de mayo de 2023». Y, por último, «explicación detallada de si, a lo largo de estos años, las facturas recibidas por el PSOE por todos los vuelos realizados por Pedro Sánchez en aviones privados de Gestair para actos de partido han sido incluidos en la contabilidad diferenciada por gastos electorales o en la ordinaria del partido y, en su caso, detallar cuáles en una y cuáles en otra, si es que han sido repartidas según los casos en una u otra contabilidad».

Veintiséis minutos después, OKDIARIO obtenía la respuesta de Ion Antolín por WhatsApp, en la que no se contestaba a ninguna de las peticiones planteadas y prefería arremeter contra «la derecha mediática», citar al PP, a Feijóo y a la campaña electoral. Esta respuesta eludió por completo el fondo del asunto.

A la petición de las facturas del Falcon privado de Sánchez, la contestación del dircom del PSOE fue la siguiente: «Nos parece que esta campaña electoral es tan importante que la derecha mediática se está empleando a fondo para sostener a un PP tan a la deriva como su líder Feijóo. El surrealismo llega a tal punto, que el mismo medio que critica al presidente del Gobierno por usar el Falcon del Ejército del Aire, ahora lo critica por hacer lo que el medio pedía: usar un avión no público para un desplazamiento a un mitin. Cómo decimos, estamos en campaña electoral».

«Absolutamente descartado»

Ante esta respuesta, OKDIARIO insistió en solicitar las facturas y los documentos de pago de esos vuelos de Sánchez en Falcon privado para actos del PSOE. Y, a la pregunta de si efectivamente se iban a facilitar a este periódico dichos documentos en aras al derecho de información de los ciudadanos, la respuesta del dircom Ion Antolín fue tan tajante como rápida: «Absolutamente descartado».

El resultado es que, después de todos los datos destapados por este diario y del notorio cruce de intereses entre partido y Gobierno, la opacidad del PSOE es absoluta: 13 vuelos en Falcon privado y ni una sola factura aportada por el partido hasta la fecha que avale su versión de que, como exige la ley, esos servicios son abonados de forma efectiva desde el partido, sin pagos camuflados desde el Gobierno con dinero de todos los españoles.